Los perros, al igual que nos sucede a los humanos, tienen diferentes necesidades nutricionales según las distintas etapas de su vida. Y es posible que cuando un perro empiece a ser más «mayor», empieces a notar que la alimentación de adultos que le estabas dando, quizá ya no le sirva.
Pero vamos por partes. En primer lugar, ¿cuándo un perro se considera que es «mayor» o senior? ¿Nos sirve el cálculo de los 7 años de humano por cada año de perro?
¿Cuando consideramos a un perro como senior?
Hay algunos signos externos, como las canas (especialmente alrededor de la boca), rigidez en las articulaciones (especialmente después de períodos de frío o períodos de descanso) y reflejos más lentos. Los sentidos se vuelven menos afilados y la audición, la visión y el sentido del olfato pueden disminuir. Los primeros signos de envejecimiento que podemos observar son un descenso de los niveles de actividad y resistencia y una tendencia a dormir más. Tales signos pueden manifestarse a partir de los 5 años de edad en las razas gigantes, mientras que las pequeñas razas terrier pueden permanecer más jóvenes hasta los 10 años o más.
Salud digestiva y función renal
Durante muchos años se creyó que una dieta baja en proteínas era más beneficiosa para los perros mayores, porque se pensaba que las proteínas podían perjudicar a la función renal pero ahora sabemos que esto no es exactamente así.
Una dieta con un nivel moderado de proteínas de buena calidad no causa insuficiencia renal, ni contribuye a su progresión en los perros, siempre y cuando se digiera y metabolice fácilmente. Las proteínas deben ser biológicamente adecuadas (de carne, pescado y huevo en lugar de cereal o proteína de soja) y de un alto valor biológico (es decir, fácilmente descompuesto en sus aminoácidos constituyentes y fácilmente utilizado para las funciones estructurales y metabólicas en el cuerpo). Ejemplos de buenas fuentes de proteínas que son ideales para los mayores perro son pollo, pavo, pescado blanco y huevo (excepto cuando exista alguna alergia o intolerancia preexistente a cualquiera de estos ingredientes).
No obstante, si existen problemas de riñón (algo bastante común en perros mayores), lo indicado es una dieta baja en fósforo, ya que retarda la progresión de la enfermedad,
Ahora bien, ¿cómo puedo saber si mi perro está afectado de disfunción renal? Los primeros síntomas pueden incluir más sed y una mayor cantidad de orina. En casos más avanzados podemos encontrarnos con úlceras, letargo, vómitos, diarrea, deshidratación, o mal aliento. En caso de duda, el veterinario pedirá una muestra de orina para hacer un diagnóstico. Un tratamiento temprano puede significar un pronóstico mucho mejor para tu perro, por eso es importante que a partir de cierta edad estés al tanto del consumo de agua y de la producción de orina.
Mantener el peso óptimo
Un perro senior es probable que lleve un estilo de vida más sedentario que cuando era joven, y por lo general requiere una menor ingesta de calorías para evitar el aumento de peso. La obesidad es un factor de riesgo para numerosas enfermedades como la diabetes mellitus, y diversos problemas articulares, cardiacos y respiratorios. Por eso, lo ideal es ofrecerle una dieta baja en grasa (o reducir la ingesta de alimentos de su perro), cuando los niveles de energía comienzan a disminuir. Una dieta que contiene el aminoácido L-carnitina también puede ser beneficioso ya que esto aumenta la conversión de grasa en energía contribuyendo así a mantener la masa corporal magra.
Cuidado de las articulaciones
Muchas dietas comerciales formuladas para el perro mayor contendrán glucosamina y condroitina con el fin de ayudar a proteger las articulaciones y prevenir el deterioro que se produce naturalmente con la edad. La glucosamina proporciona los elementos básicos para la síntesis de nuevo cartílago articular, mientras que la condroitina ayuda a bloquear las enzimas que descomponen el cartílago. Ambos son ingredientes seguros y naturales, y cualquier exceso que el cuerpo no necesita simplemente se excreta en la orina. Algunas dietas de alto nivel también pueden ser complementadas con MSM que tiene propiedades anti-inflamatorias y analgésicas.
Alimentación para evitar dolores articulares en los perros senior
Puede ser beneficiosa una dieta que contenga ácidos grasos esenciales, ya que los omega-3 liberan compuestos en el cuerpo que reducen la inflamación. El aceite de salmón es una excelente fuente de ácidos grasos esenciales.
Los perros que ya padezcan dolencias articulares pueden necesitar niveles aún más altos que los que proporciona la dieta, por lo que en la mayoría de los casos, puede administrarse un suplemento de este tipo junto con la dieta (siempre bajo la recomendación o supervisión de un veterinario).
Inmunidad y prevención de enfermedades
Las dietas enriquecidas con antioxidantes naturales (de vitaminas, minerales y extractos de plantas) son también una buena idea para los perro mayores, ya que se combinan en el cuerpo para inhibir la formación de radicales libres destructivos.
Aunque el envejecimiento de las mascotas es inevitable, la alimentación de buena calidad, y una dieta de apoyo le ayudará a tener una mayor calidad de vida, ya que con una mejor digestión y un mejor funcionamiento del sistema inmune, se crea una reacción en cadena en los otros tejidos, órganos y sistemas de el cuerpo.