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Si dentro de un millón de años, una civilización avanzada tuviera que adivinar cómo son los gatos actuales y su modo de vida, y se fijara en los cómics y los dibujos animados, probablemente tendría serios problemas para obtener una imagen más o menos realista de lo que es un gato en la actualidad, y cómo se relacionan con nosotros, los humanos.

Algunos gatos de dibujos animados presentan la peor cara del comportamiento humano, y a menudo se les da una personalidad poco alejada con la realidad. Cualquiera que haya tenido un gato sabe lo alejada que está su mascota de iconos de la cultura pop como Garfield, o el Tom de Tom & Jerry.

Top 5 gatos de dibujos animados menos realistas

  1. Garfield: Vago, perezoso, tramposo, manipulador… y comedor compulsivo de lasaña. ¿Qué sería de nuestras mascotas si le diéramos una alimentación tan poco equilibrada, que contiene materia prima tan poco adecuada para los gatos (sobre todo en grandes cantidades) como la leche entera y la mantequilla? A los problemas de peso, le seguirían seguramente problemas digestivos y de piel.
  2. Tom, el de Tom & Jerry. Además de andar a dos patas, lo que menos realista hace a Tom es u total incapacidad como cazador. Capítulo tras capítulo el pobre Tom intenta atrapar a Jerry, que gracias a su astucia escapa una y otra vez. ¡Todos sabemos que un gato real hubiera pillado al ratón hace tiempo!
  3. Hello Kitty. Sí, se supone que es un gato. Una gatita, en realidad, aunque totalmente inexpresiva para que sea más sencillo identificarse con ella.
  4. El Gato con Botas que aparece en Schrek. Además de la caracterización, con capa, espada y botas, y ese doblaje de Antonio Banderas, a este sí que le han querido dar un tono más realista, con esas bolas de pelo que vomita de vez en cuando y esos ojillos adorables que pone cuando quiere conseguir algo
  5. Doraemon, el gato cósmico. No entendemos muy bien qué relación tiene con los felinos este supuesto gato robot cósmico venido del futuro, pero cualquier parecido con un gato real es pura coincidencia.

Mención aparte merece ese gato anónimo que acarician los supervillanos mientras ríen fuerte tras hacer una fechoría… ¿por que los villanos han de tener un gato al que acariciar?

En todo caso, estos gatos de dibujos animados nos hacen reír y disfrutar casi tanto como nuestros «lindos gatitos» ¿no es así?

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