Los snacks no solo sirven para premiar la conducta positiva de un perro, sino que también tienen numerosos beneficios que, en muchas ocasiones, no conocemos.
Así que si quieres saber más sobre estos deliciosos premios, ¡sigue leyendo!
Son un gran divertimento y estímulo mental
Está claro que cuando pensamos en snacks lo primero que se nos viene a la mente es su uso como refuerzo positivo. Y es que es, sin duda, son una forma estupenda de motivar la educación y adiestramiento de tu peludo mejorando, al mismo tiempo, vuestro vínculo.
Pero es que, además, si los utilizas como es debido, consiguen mantener a tu perro despierto y activo al ayudarle a utilizar su olfato y ser un estímulo mental que permite liberar endorfinas naturales.
Sabiendo esto, puedes utilizar snacks que se puedan trocear, como los palitos de cangrejo, y esconderlos por tu casa o por el parque, dejarlos caer en el suelo para que lo busque, meterlos dentro de juguetes interactivos o sino utilizar premios como nuestra asta de cabra que su relleno lo hace especialmente palatable y despierta el ingenio y atención.
Ten en cuenta siempre las condiciones de tu perro ya que debes buscar snacks que sean lo suficientemente duros como para que le entretengan pero siendo lo suficientemente asequibles como para que no se conviertan en una frustración. Y lo mismo pasa con los juegos.
Mejoran su salud
Aquellos como la panza de cordero o las orejas de conejo, ayudan a combatir momentos de decaimiento anímico y cansancio como la anemia, al contribuir a la producción de energía y a la mejora del metabolismo.
Por otra parte, la tráquea de vacuno es una buena fuente natural de colágeno y apoyo al sistema articular y las nubes de ternera son ricas en hierro y vitaminas que influyen en procesos de recuperación, periodos de estrés o de trabajo intenso.
Pero además, estas chuches también juegan un papel fundamental en la salud bucal de tu peludo y ¡por diferentes motivos!
Ayudan a limpiar los dientes eliminando restos de comida y, a su vez, como son más costosos de masticar, con ese ejercicio de encías se consigue desprender y reducir el sarro. Esto sucede con aquellos, como el flamenquín o el tendón de vacuno, que al ser más duros y resistentes, permiten que dure en el tiempo y, además, alarga el entretenimiento. Asimismo, al masticar el snack la salivación aumenta lo que consigue que mejore su aliento evitando la halitosis, mantienen las encías fuertes y mejoran los músculos de la mandíbula.
Reducen los niveles de estrés, ansiedad y nervios
Muchos perros pueden sufrir ansiedad o estrés ya sea por quedarse solos en casa o por traumas pasados, entre otros. Si dejamos que esta angustia se apodere de ellos, la salud de nuestro peludo se verá realmente mermada.
Es por eso que los snacks son una excelente forma de mejorar su situación y conseguir entretener y tranquilizar a nuestro peludo. Lo ideal en estos casos es utilizar chuches que sean más complicados de deshacer, como puede ser el nervio trenzado perfecto para perros con ansiedad por separación o las barritas de ternera que ayudarán a desestresar y a calmar a aquellos animales más nerviosos.
Una buena manera de utilizarlos es escondiéndolos en sitios estratégicos de la casa para que nuestro perro se centre en buscarlos y olvide que está solo en casa.
Recuerda que un snack siempre va a complementar la dieta de tu perro pero nunca, en ningún caso, la sustituye.
Para evitar malos hábitos o problemas de sobrepeso, es esencial que aprendas a utilizarlos de forma correcta. Por eso, adminístralos en pequeñas cantidades para no saciarlo y que valore el esfuerzo, varía el tipo de premio para mantener su interés y reserva sus chuches favoritas para los momentos más complicados.