
Para un perro, los más normal es que “tú siempre vayas despacio” aunque vayas en bici, a toda velocidad, siempre intentará ir por delante, porque su energía e instinto, se lo dice.
Cuando adoptas un perro o te lo regalan de cachorro, solemos darle todo caricias y cariño pero, un perro es un animal acostumbrado a vivir en manada, y como buen animal de manada jerarquizada, necesita un líder.
Probablemente habrás visto a las típicas señoras con el perrillo que tira de ellas, o al señor al que le saca a pasear su perro de 40 kilos…Este tipo de acciones nos muestran una manada, mal jerarquizada. En cualquiera de los dos casos, el perro es el “alfa” de su manada o está en un escalón más alto en ella, y por eso va por delante. Si, un perro pequeño también se siente “macho alfa” o “hembra alfa” si no tiene alguien que le guíe y le enseñe unas normas en casa y en la calle.
Entonces, ¿qué es lo que podemos hacer para convertirnos en el alfa de la manada?
Muy sencillo: poniendo normas, y enseñándole a que las cumpla. Una de las formas más utilizadas es “el premio por hacerlo bien” o refuerzo positivo.La idea de premiarle cuando hace algo bien, forma parte de la idea del refuerzo positivo. Es una forma de educación basada en premiar lo que se hace bien. Y con el perro suele dar buen resultado. El perro aprende por repetición, por lo que todo lo que quieras enseñarle, además de con paciencia, deberás repetirlo varias veces. Estate seguro que tu perro aprenderá y te ayudará a vivir mejor con él.
Además del refuerzo positivo, estas son algunas normas o costumbres que solemos pasar por alto:
1. Un perro debe tener su sitio.
El perro, debe tener su madriguera o su estancia. Es cierto que muchas veces es el perro el que elige su sitio, pero lo mejor es que le dediques una zona en casa para él, normalmente con un colchoncillo, una cama o algo parecido. Ese será su sitio, y muchas veces, para que vuestra relación no se convierta en una anarquía, lo mejor es que le mandes a su sitio.
Esta orden provoca que el perro sepa quién manda, y como ya hemos dicho, vive en una manada y necesita un líder. Una buena opción para que resuelva sus miedos a quedarse sólo o la llamada “ansiedad por separación”, es que le metas en un trasportín dentro de casa y le dejes un buen rato ahí. Déjale un hueso para que muerda, su juguete o algo parecido y así, entenderá que debe y puede estar sólo.
2. NUNCA saques al perro cuando llegues a casa y te salude “a lo loco”.
Al llegar a casa, no le saludes a él el primero, sobre todo si da botes a tu alrededor. No temas darle suaves golpes con tu rodilla si se pone sobre ti a dos patas. Espera un rato antes de saludarle, cuando se calme, le saludas. Y esto, debe hacerlo todo el que llegue a casa de visita, siempre. Aprenderá que él está ahí pero no es el más importante, te ayudará a ser más líder.
Un perro debe salir a la calle muy tranquilo y, hasta que no lo esté, no deberá salir. Al coger la correa, él debe entender que tiene que estar tranquilo, y lo más recomendable es que cojas la correa, aunque no vayas a salir y pasees por casa varias veces con ella en la mano. El probablemente relacione que coger la correa es salir a la calle, entonces sus revoluciones subirán como la espuma. A partir de hoy, coge la correa y pasea por casa…que el vea que la correa no significa necesariamente salir de casa, esto con el tiempo le recordará que tiene que estar tranquilo e incluso que puede quedarse sólo.
3. Al darle de comer, tranquilo.
Una buena acción para enseñar a tu perro quien es el líder, es que debe estar calmado y sentado para comer. Si sabe sentarse es más fácil, mándaselo.
Cuando vayas a darle de comer, dile que se esté quieto, mientras sujetas el vaso de la comida. Si vas a agacharte y se mueve, vuelves a levantarte y le ordenas quedarse quieto (sentado, lo mejor). Mientras no esté quieto, la comida no tocará el suelo.
Hola, adopté hace 4 meses una perra de más o menos 5 años que vivió siempre en la calle. Es súper educada adentro de mi casa, no rompe nada, no ensucia, se queda sola super bien cuando voy a trabajar, es realmente un encanto y super dulce conmigo. Solo tengo dos problemas en los paseos, 1) quiere saludar a todas las personas que se cruza en la calle, les mueve la cola y tira hacia ellas. La mayoría de las veces la gente la saluda porque es tamaño chiquito y es realmente muy linda y simpática, pero si quiero pasar por la puerta de un bar con mesas afuera todo se vuelve un poco incómodo porque no me hace caso si le digo vení. 2) Hay días que pasea super bien y hay días que maneja el paseo ella y no hay caso con que me obedezca. Algún consejo? Muchas gracias
Hola! Muy bien, eso son pequeñitos detalles que ir puliendo poco a poco con tiempo y paciencia. Premiar cuando lo hace bien o para distraer su atención funciona muy bien. Puedes llevar en la mano algún tipo de chuche o snack de modo que cuando se dispone a saltar sobre alguien o distraerse con algo, sepa que eso está ahí y sólo con el simple hecho de ofrecérselo e indicarle que se lo vas a dar, distraiga la atención de lo que iba a hacer para centrarla en aquello que llevas en la mano, caminará olisqueándolo o pendiente hasta pasada la distracción, y finalmente una vez centrada y hecho bien se lo das. Y así sucesivamente, poco a poco, irá más pendiente de ti que de las distracciones ajenas. Respecto al segundo punto, correa corta (si tiene metros siempre irá por delante) y ir corrigiéndola para que camine al lado, puedes utilizar un sistema similar al anterior. Un saludo.
Hola una consulta tengo una perra de 3 años, la adopté, de cachorra vivia en otra casa, ahora la traje a mi casa y vivimos muchas personas en la misma casa, ya pasó 1 año y medio qué esta en mi casa y hasta ahora no se acostumbra a las otras personas les ladra cada vez qué les ve entrar o salir, ahora solo me queda mantenerla encadenada por peligro a qué muerda.
Podria darme algunos consejos por favor…
Hola! Entiendo que la situación es complicada, pero encadenarla sólo hará que la situación empeore. Mostró agresividad? O sólo ladra? Es más que probable que lo haga por miedo y desconfianza, y si, a veces el miedo podría llevar a morder, pero no suele pasar si se respeta su espacio y distancia. Si ladra, gruñe o muerde por miedo, no hay más solución que ayudarle a ganar confianza, y esto requiere tiempo, paciencia, y sobre todo mucho cariño. Refuerzo positivo. Que esas personas que entran y salen lleven alguna chuche o snack para darle antes de que se ponga nerviosa, que se lo ofrezcan con unas palabras de cariño y ánimo , y una caricia si lo permite, para que vaya relacionando esas personas y situaciones con algo positivo. Sin gritos ni nervios, calma, paciencia y poco a poco. Un saludo y ánimo.
Hola tengo un pomsky de 11 meses, desde los tres meses se ha intentado montar a todo de cuatro patas y una persona, es verdad que le mordieror el primer dia de calle, ( le quito una tetilla entera, luego le han mordido uno de los que agarra y cabecea para matar la perra le mordio pero conseguimos que no pudiese zarandearlo, ahora tiembla como nunca habia visto en ningun perro, luego un tercero pero ya no anda por el barrio. No se como corregir ese aspecto en casa hay veces que no hace caso y la llamada es imposible como vea algo se escapa, hasta ahoro le soltabamos pero se esta recuperando de que se le corto toda una almohadilla de par en par, hemos pensado collares con antiescape sin poner la vaya invisible o uno normal, si me pudieseis recomendar algo lo agradeceria
Hola! No entiendo si la consulta es en referencia a que monta cosas y personas, a que lo muerden o a los escapes. Es joven aún, estás en tiempo de educarlo. Respecto a la monta, eso puede mejorar mucho con las castración, que también puede ser favorable en otros aspectos, coméntalo con su Veterinario. El hecho de que le muerdan es más un problema de los otros que de si mismo. Entiendo que te refieres a que desde entonces es muy asustadizo y se escapa, este es el problema en el que más tienes que trabajar. Busca la manera de evitar conflictos y perros problemáticos pues siendo el tan inseguro a veces no se entenderá bien con ellos y surge el problema. Busca perros sociables, tranquilos y pacientes, de familiares y conocidos, o de la zona, y trabaja con ellos poco a poco, acercamientos a poquitos, que se conozcan, huelan, en días diferentes, cada vez un poco más, para posteriormente llegar a permitirles el juego libre. Es importante que aprenda a relacionarse con sus iguales, a socializar, ganará en seguridad y en calidad de vida.